Una funda de almohada es un accesorio básico para la cama, una bolsa rectangular de tela abierta por un extremo, diseñada para ajustarse perfectamente sobre una almohada. Su existencia es fundamental para mantener la higiene de la almohada, ya que es mucho más fácil lavar la funda semanalmente que limpiar toda la almohada. Este sencillo gesto protege la integridad de la almohada contra manchas, humedad y alérgenos. La elección del material de la funda influye directamente en la calidad del sueño y la comodidad. Las opciones populares incluyen algodón por su suavidad y transpirabilidad, lino por sus excepcionales propiedades absorbentes y refrescantes, seda o satén por su superficie lisa y de bajo rozamiento que beneficia el cabello y la piel, y tejidos técnicos como el bambú por su tacto sedoso y regulación térmica. El diseño de la abertura también es importante, con opciones como un dobladillo simple, un cierre tipo sobre que oculta la almohada, o una cremallera para mayor seguridad. En una habitación infantil, las fundas con estampados divertidos pueden añadir un toque lúdico, mientras que en una suite principal, fundas blancas bordadas transmiten elegancia. Para descubrir el material y estilo de funda ideal según sus necesidades de confort y decoración, comuníquese con nuestro servicio al cliente para obtener ayuda.